mis pinceles

31.8.09

Brevedad

Fotografía de Albert Lizasoain

Brevedad en el ruido que transporta el aire. A veces creemos volar con una cajetilla de tabaco en el bolsillo llamada soledad. El peso pesa. La vida también. A veces creemos estar enamorados de sombras efímeras. Es como si la lluvia que nos moja el cabello una tarde de domingo tratara de recitar lo nunca escrito por un poeta. La gravedad empieza a caer en nuestros cuerpos y pesamos más de lo que podemos pesar. Y ahí nos derrumbamos. Es como si el silencio no cesara de hacer ruido con un martillo persistente y sin finalidad alguna. Tratamos de creernos fuertes cuando en cada poro de nuestra piel resuena una melodía con olor a nostalgia.
A veces creemos que esto es demasiado difícil para nosotros. Sólo somos una partícula a oscuras que abrió fugazmente los ojos; aunque solamos pedir deseos a estrellas, también fugaces, que no nos concedan.

21.8.09

Traspiés en la orilla del mar

El amor es un racimo de uvas negras.
Un labio superior a pleno grito.
Un labio inferior a grito pleno.
Un dedo señalando miles de fronteras.

Una gota de agua en el momento preciso.
El amor es desnudarte con versos.

19.8.09

Olor a mierda

"A políticos corruptos y demás olores indeseables"

Esperen a que se nos deshagan los pulmones
Y nos deshinchen picos de cuervos asfaltados
Y nos deshilachen bancos con puertas sin salida
Y nos desmonten sus abrazos asfixiantes
Y las tumbas amontonadas nos desmientan
Que el olor inacabado que desprende el suburbio
A veces no espera tanto como ustedes.

15.8.09

Nota mental

"Cumpleaños feliz. Cumpleaños feliz. Me deseo a mí misma cumpleaños feliz" (canción dedicada a mis 20 estrenaditos).

Me colma de nuevo
La mirada del transeúnte.
Penetrante. Lasciva. Venidera.
Me pierden los enjambres,
La muchedumbre gris y triste,
El sol calenturiento,
La sábana sin el roce
De tu aliento,

Las bocas repletas de alpiste.
Me desmayo en el reloj
impaciente
Que cuelga de mi ceguera.
¡Que pa' eso cumplí los veinte!

13.8.09

Cero

Carmín que roza tu labio enfermizo.
Calor en inviernos inolvidables.
Sudor en agostos invernaderos.
Papel lleno de versos, mi muso.
Papel sin huecos,
Como tu piel, llena de besos.
Trenes que no alcanzan estaciones.
Siluetas que no entienden
De reflejos.
Uno. Dos. Cero.
Escóndete en mis huecos.
Arrástrate serpentinamente.
Colma de lujuria mis delirios,
mis deseos.
Conviérteme en cenizas.
Que la Muerte es un orgasmo.

9.8.09

Es difícil ser feliz una tarde

A Gloria Fuertes, mi querida poeta.

Vuelve el recostado Dionisio
A envolverla de embriaguez.
En esta noche que atraviesa
Los destellos de su tumba,
De su piel.
Canciones de sabiduría
Para hombres sencillos
- como usted decía-
No hay lana en el ovillo,
Ni gato que maúlle
Indistinto a su fin.
- Que son siete las vidas
Que tal vez poseen.
Que son siete las muertes...
¡Que no se creen! -
Pero su poesía guarda
una inmortalidad
cosechada por su hiel:
el suburbio del pueblo,
la guerra, el hambre,
la muerte, la vida,
la fidelidad de lo infiel.
¡Qué duro haber descubierto
sola, MUY SOLA,
lo dulce que es la miel!

7.8.09

Susurros de monasterio

Atrápate en este cuerpo inacabado,
en esta piel que se deshace entre lienzos.
Atrápate en carne y movimiento,
en gotas de sudor, en purgatorio profanado.
Atrápate en mí muy atrapado.

6.8.09

Versos del cigarro II

"humos que desolan pulmones
páramos secos donde residir relajados
por la nicotina de vivir".
Juanra Cuchi

Sola. Atormentada por nadie.
Sola. Tocando un solo
de piano con las vísceras
de mi silueta solitaria.
Sola. Esperando a nadie.
Callando lo que no sé decir,
escupiendo lo que nunca dije.
Sola. Más bien mal acompañada.
Que la soledad más triste
es atraparme en una calada.

4.8.09

Sombra de litigio (AUTOBIO)





Tengo la cabeza repleta de sueños.
Y las piernas hinchadas de pasar
Horas y horas en establecimientos
soportando des-humanos hambrientos.

Tengo maquillaje por casa.
Un pinta labios para mi novio,
-más bien mi holograma-
Para que cuando venga
Danzando en autobuses lejanos
La vida sea más sencilla
Y lo real demasiado extraño.

Tengo los pies apoyados
En ramas finas de terciopelo.
Malabarista de otras caras
-más bien de espectros-.

Un cigarro siempre encendido.
Una gota de sangre que coagula.
Una botella de agua caliente.
Una habitación siempre a oscuras.