mis pinceles

17.6.11

In dubio pro reo

Reconozco que echo de menos la caricia anónima,
El sexo de acoso y derribo,
una palabra sin olfato ni ortografía,
un minuto de soledad cerrado por vacaciones.
Me cuesta pensar que me crece el pelo
y que el corazón bombea a su manera
dependiendo del lugar donde me acueste.

Admito la desgracia de ser feliz.

Impugno una base sólida de muecas,
de sombras que sangran a lo lejos,
de hilos de farolas extraviadas.

Reconozco que no busco porque encontré.

Pacíficamente me arrastro por el verso inacabado,
Sin saber cómo termina una historia
Que comienza
lejos de mí.

4 comentarios:

  1. Yo tb la echo de menos..
    Un saludo

    ResponderEliminar
  2. Que perfecto poema te ha salido, Marta. No me gusta el primer bloque, donde todavía se advierte cierta impostura de la forma. Pero después del "Admito la desgracia de ser feliz" todo tiene la naturalidad de una flor que se abre en aceleración de frames en uno de esos documentales. Me ha encantado el último verso, es el derrotismo tranquilizador del nada puede hacerse.


    PD. Sin embargo, y si me permites la crítica, sigo viendo en tus escritos sólo una puntita de hielo a flote, quisiera saber hasta qué profundidad es capaz de extenderse el resto del iceberg...

    ResponderEliminar
  3. Tengo que discrepar con el Chus, pues para mi la primera estrofa, y el verso de "Admito la desgracia de ser feliz", es de lo mejor que he leído de ti.
    Denoto un verso más pausado, más reflexionado, menos "urgente", y la sensación de verso no-vomitado, le da un matiz diferente a otros versos, cuando escribías más alocadamente, y las ideas estaban, pero sin acabar de pulir.
    Ese "pacificamente" es la clave. Ese enfrentarte a la poesía ahora sin urgencia, ya con consciencia.

    PD. Puesto que ya no buscas porque encontraste, quizás debas cambiar tus "datos pesonales": "...busco sin busqueda lo que me falta para ser feliz: Nada". Ya encontraste parte de lo que te hace feliz: Mucho!

    autor: Profesores al borde de un ataque de nervios

    ResponderEliminar
  4. Es lo que tiene la felicidad, que no vende.
    ¡Que se jodan!
    ¡Que vendan ellos!
    ¡Disfruta!

    ResponderEliminar