Fotografía de Albert Lizasoain.
Como una diosa
dentro de una pecera,
vas derramando el agua
y lo esparces por el suelo.
Como una caracola de mar
tienes un universo por ver,
pero te encierras en tu guarida
enroscada y perdida
agraviándote escondida...
Pecera que pudre
el reloj de tu vida.
Te sublevas ante las miradas
sucias y perecederas,
que sólo quieren cautivar
las alas que guardas
en tu imaginación.
En tu mirada fragmentada
en tu búsqueda
de la Soledad,
sin saber que la tienes
en tus alas,
en tu mar.
Esta preciosa Marta, te felicito, muakkkkkkkkkk
ResponderEliminarCuando ese pez, vea a través de la pecera que hay vida y que esa vida eres tú llena de ilusiones, nuevos proyectos, amor por entregar y por ser feliz contigo misma de forma incondicional, saltará de su pecera.
ResponderEliminarGracias Marta, es un blog precioso.
David
Sólo he podido leer la primera, de esas palabras que tu llamas 'cutrerías' con dolor, pues si yacen del corazón, han de ser mejor nombradas que tales cutrerias. Pequeños crímenes para los que no existe una excusa, las llamaría yo. Me encanta.
ResponderEliminarQue orgullo poder decir que mi hermana escribe tan bien. Nunca dejes de regalarnos estos escritos.
ResponderEliminarPodría decir muchas cosas de este poema. Pero creo que lo mejor que puedo decir es que cada vez que lo leo me pone la piel de gallina y a la vez invita al optimismo. Sigue asi, porqué aunque la vida pueda parecer una ruleta, jugar a ella puede ser maravilloso!!! :*******
ResponderEliminarNo dejes de escribir con el don que se te regaló...Recuerda ver los días con una amplia sonrisa.
ResponderEliminarIván
MMM... hola soy yo de nuevo...
ResponderEliminareste poema me ha recordado al cuento del "patito feo",(uno ha de demostrar lo que vale), revelarse, y ala vez rebelarse contra lo adverso venidero.
Sigue asi.
Cuidate.
(www.poetasdeniebla.blogspot.com)