mis pinceles

6.3.11

No diré cuánto mide


He aprendido a frotar mi piel con intensidad.
A alargar mis brazos y protegerme.
A esconder mis lágrimas en una sonrisa falsa.
A creer en el ateísmo.
A jugar sin fuego.

He aprendido a volar en el gateo.
A maullar ladrando incesantes ironías.
A desvestirme con cada desvelo.

Aprendí a superar mis miedos
inventándome otros. De nuevo.

Me doy lecciones día a día.

Por las noches aprendí a no nombrarte.

He borrado tu número de mi listín.
Ni siquiera me lo aprendí de memoria.

He aprendido a calcular páginas en blanco
y a hacer ecuaciones de versos.
Y aunque no me salgan los números

he aprendido a desahuciarte
de la suciedad de mi hogar-tristeza.
A deshojarte sin margaritas.
A desquebrajar tus fotografías.

Y aunque me claves tu espada
(No seré mala. No diré cuánto mide)
no me desangro.

Sí. Me faltan sueños.
Pero tú ya no me faltas.

8 comentarios:

  1. esta super original el poema, me gusto mucho :>

    ResponderEliminar
  2. Amiga Marta, en la vida todo son escudos que nos vamos echando en cima como si de una armadura se tratase, a veces creemos que estamos protegidos pero el corazón no entiende de temples, sufre y ama casi a la misma vez.
    Una entrada hermosa, un placer estar presente. Saludos, oswen.

    ResponderEliminar
  3. deshauciarte de la suciedad, excelente :D
    Saludos!

    ResponderEliminar
  4. Sólo te falta dejar de escribirle poemas... difícil tarea, lo sé, qué vas a contar.

    Besos

    ResponderEliminar
  5. una que ha pillado el quit de la cuestión!
    Gracias, Meri.

    ResponderEliminar
  6. ¡Cuantas cosas podemos aprender de la vida si hay sensibilidad en nuestro corazón y el alma y los sentidos atentos!

    Felicitaciones Marta, excelente tema.

    ResponderEliminar
  7. Déjame decirte que, después de leer algunas cosas de tu blog, me pareces el mejor descubrimiento en lo que va de año literariamente. Y fíjate que no hablo de blogias, es un literal literariamente. Enhorabuena. Paso de adjetivar en exceso el comentario, o de señalarte con el dedo los oxímoron (que los hay) en plan fantasma. Prefiero un honesto DE PUTA MADRE, que es lo que me viene a la cabeza después de leerte... Enhorabuena.

    ResponderEliminar